Por Danae Merced

Un salón al aire libre que promueve la autogestión sostenible y la educación ambiental en Puerto Rico, eso es Aula Verde. El proyecto inició en 2002 y abrió sus puertas al público en 2004. Los primeros pasos del proyecto fueron brindarles oportunidad de empleo a personas que tenían una sentencia suspendida. Para muchos de ellos, como a Santa Quiñones, encargada del proyecto, ha sido una experiencia que les ha cambiado la vida.

Aula verde, localizada en la comunidad San José de Río Piedras, promueve la educación ambiental en un escenario real y natural, donde los estudiantes aprenden sobre factores abióticos y bióticos, la importancia del insecto en el ambiente y sobre la vida silvestre urbana.

Además, los estudiantes conocen el proceso de metamorfosis de la mariposa en un laboratorio y luego tienen la oportunidad de observarlas en su hábitat natural.

El terreno comprende tres mil metros cuadrados e incluye un jardín con una gran variedad de plantas, estanques, árboles de caoba que ya existían en el terreno y un edificio diseñado en armonía con el ambiente natural, el cual alberga la oficina administrativa, el laboratorio y conservatorio de las mariposas. Con la llegada de las plantas hospederas y alimenticias llegan las mariposas, como la monarca y la sulfur, entre otras, explicó Quiñones.

Pero Aula Verde enfrenta actualmente un gran reto, y es la falta de fondos para el mantenimiento de este bosque urbano y los servicios que ofrecen a los estudiantes y público general. Anteriormente recibían fondos federales destinados para la investigación de métodos alternos de habilitación, dirigidos a una corporación sin fines de lucro, sin embargo, éstos fueron eliminados. “Es increíble que en las portadas de los periódicos digan que tienen que devolver unos fondos [federales] cuando organizaciones como éstas los pueden aprovechar”, manifestó Quiñones. Pese a la falta de presupuesto, Aula Verde continúa trabajando con personal voluntario, ya que desde el año pasado dejaron de recibir salario. Estas personas, como Quiñones, planifican que en un futuro Aula Verde cuente con un albergue de animales, donde los niños del barrio aprendan sobre el amor y la compasión hacia los animales.

Mientras tanto, Aula Verde recibe algunas donaciones de entidades y de los estudiantes cuando visitan el proyecto.
Para visitar Aula Verde, hacer alguna donación o ser voluntario debe comunicarse al 787-281-7763, de 7:30 a.m. a 3:00 p.m. Están ubicados detrás del Colegio Ángeles Custodios, calle Sicilia #13, comunidad San José, Río Piedras. Para más información visite www.aulaverde.org.

(La autora es estudiante de primer año de periodismo en la Universidad Central de Bayamón (UCB). Marielisa Ortiz Berríos colaboró en esta historia.)