Vivero central del DRNA, localizado en el Bosque Estatal Cambalache, Arecibo (suministrada por el DRNA)

La Sección de Investigación y Monitoría Forestal del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) está trabajando en la colección de semillas de la flora nativa amenazada o en peligro de extinción para propagar y mantenerlas, para que luego puedan ser reintroducidas en las áreas protegidas del DRNA, informó Daniel J. Galán Kercadó, Secretario.

«Nuestros especialistas diariamente realizan evaluaciones técnicas de los recursos forestales utilizando métodos de análisis geo-espacial y desarrollan planes de manejo para los bosques públicos y privados que adquiere la agencia para este propósito», añadió.

Actualmente el Vivero Central del DRNA, que ubica en el Bosque Estatal Cambalache de Arecibo, cuenta con un umbráculo de germinación y área de endurecimiento de plantas. Al momento se manejan 14 especies, entre ellas:

  • palo de jazmín (Styrax portoricensis)
  • palo de Ramón (Banara vanderbeltii)
  • palo de Rosa (Ottoschulzia rhodoxylon)
  • matabuey (Goetzea elegans)
  • palma manaca (Calyptronoma rivalis)
  • cobana negra (Stahlia monosperma)
  • higo chumbo (Harrisia portoricensis)
  • nogal (Juglans jamaicensis)
  • erubia (Solanum drymophilum)
  • diablito de tres Cuernos (Buxus vahlii)
  • palo de nigua (Cornutia obovata)
  • chupacallos (Pleodendron macranthum)
  • Daphnopsis hellerana
  • Cordia bellonis

Los técnicos del DRNA, al presente, están monitoreando una siembra en el Bosque Estatal de Guajataca de más de 200 individuos de palma manaca, 20 individuos de Daphnopsis hellerana y 20 individuos de diablito de tres cuernos. En los terrenos del Bosque Estatal de Cambalache se han sembrado y se están monitoreando 10 individuos de Daphnopsis hellerana y dos árboles semilleros de palo de ramón.

“Próximamente estaremos reintroduciendo en el Bosque Estatal de Boquerón 20 individuos de higo chumbo. Otras especies como el palo de rosa y la nigua están en el proceso de endurecimiento y crecimiento para ser trasplantadas y luego reintroducirlas a un área apropiada, con el fin de lograr una población forestal saludable de especies nativas en peligro de extinción», finalizó.