Por un Caño Martín Peña limpio y reclamando su derecho a la salud, 200 niños de tercero a sexto grado de las comunidades aledañas al cuerpo de agua bailaron al ritmo del reggaetón y cantaron letras de su autoría para concienciar.
“Es urgente que los niños conozcan nuestra realidad, derechos y responsabilidades, para hacerlos partícipes nuestra lucha por un ambiente más saludable y digno”, dijo Lucy Cruz, presidenta de la organización de base comunitaria G-8, Inc. “Esto se aprende haciendo, y ellos no sólo trabajaron duro para prepararse para la competencia, sino que tomaron talleres e hicieron huertos escolares y otros proyectos en sus escuelas.
«Tenemos que hacer un reciclaje para que el Caño tenga un lindo paisaje, algunos están ensuciando, cuando se supone que estén ayudando, luchemos todos gozosos y nuestro caño quedará hermoso», dijo Gerard Constanzo, estudiante de 6to grado de la escuela Santiago Iglesias Pantín y miembro de Líderes Jóvenes en Acción.
El VI Caño Reggaetón Contest se llevó a cabo en el teatro de la Escuela de Derecho de la Universidad de Puerto Rico y recibió este año una subvención de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) como parte del programa Urban Waters. Previo a la competencia se ofrecieron talleres y actividades sobre educación ambiental, salud pública y justicia social, para que los niños preparen sus canciones sobre la salud ambiental del caño y su gente.
El jurado a cargo de evaluar las presentaciones de los niños estuvo compuesto por el director interino de la EPA, José Font, Arturo Massol (Casa Pueblo) y los exponentes del género JAMSHA, Glory y Pirulo.
El VI Caño Reggaetón Contest fue organizado por la Corporación del Proyecto ENLACE, el liderato comunitario del G-8, Inc. y el Fideicomiso de la Tierra del Caño Martín Peña, con la participación del Comité Multisectorial de Concienciación Ambiental al que pertenecen además la Junta de Calidad Ambiental, la Autoridad de Desperdicios Sólidos, la EPA, el Programa del Estuario de la Bahía de San Juan, Aula Verde, el Fideicomiso de Conservación de Puerto Rico, Huertos del Caño y la Asociación Nacional de Derecho Ambiental. Contó además con el apoyo de la los voluntarios AmeriCorps VISTA, la Universidad del Sagrado Corazón, los artesanos Malcom Ferrer y José Caraballo, el Departamento de Educación, la Escuela de Derecho de la Universidad Interamericana, Pan Pepín, el Departamento de Recreación y Deportes y el Departamento de la Vivienda.
Este año participaron las escuelas Manuel Boada, Emilio del Toro, Haydée Rexach, Jaime Rosario Báez, Moisés Meléndez, Santiago Iglesias Pantín y Juanita García Peraza. Los ganadores recibieron un recorrido guiado por el Estuario de la Bahía de San Juan y un taller con Aula Verde, entre otros premios.
Sobre el Proyecto ENLACE
El Proyecto ENLACE une esfuerzos de la comunidad, el sector privado y el gobierno para mejorar la calidad de vida de 27,000 habitantes de las comunidades aledañas al Caño, y rehabilitar este cuerpo de agua. El Distrito de Planificación Especial del Caño Martín Peña colinda con la avenida Ponce de León, al oeste; Borinquen, al norte; Quisqueya, al sur; y la avenida Barbosa y la quebrada Juan Méndez, al este. Incluye las comunidades de Israel-Bitumul, Parada 27, Las Monjas, Barrio Obrero, Barrio Obrero Marina, Buena Vista Santurce y Buena Vista Hato Rey. ENLACE coordina sus trabajos con el Proyecto Península de Cantera. ENLACE ganó en 2008 el importante premio Paul Davidoff para Cambios Sociales y Diversidad, que otorga la Asociación Americana de Planificación, por su Plan de Uso de Terrenos y su Plan de Desarrollo Integral para el Distrito de Planificación Especial del Caño Martín Peña.
Sobre el G-8, Inc
El G-8, Inc. es una organización sin fines de lucro que reúne al liderato de las doce organizaciones de base comunitaria que representan a los residentes de las ocho comunidades aledañas al Caño Martín Peña. Éstas son Israel-Bitumul, Parada 27, Las Monjas, Barrio Obrero San Ciprián y Oeste, Barrio Obrero Marina, Península de Cantera, Buena Vista Santurce y Buena Vista Hato Rey.
Sobre el Fideicomiso de la Tierra del Caño Martín Peña
El Fideicomiso de la Tierra del Caño Martín Peña se creó como parte de la Ley 489 de 24 de septiembre de 2004, aprobada unánimemente por la Legislatura de Puerto Rico. Fue constituido con las tierras de tenencia pública que había en el Distrito de Planificación Especial del Caño Martín Peña, gran parte de las cuales han sido el hogar de miles de ciudadanos por generaciones. Unas 200 cuerdas de terreno son propiedad de la comunidad mediante el Fideicomiso, que opera de forma similar a un condominio. Su reglamento fue producto de un amplio proceso de participación ciudadana. Sus objetivos son: (1) evitar el desplazamiento de la comunidad y resolver el histórico problema de tenencia de la tierra mediante un derecho de superficie que puede hipotecarse, heredarse y venderse; (2) superar la pobreza (recoge los beneficios del aumento en valor de las tierras que será producto de la inversión pública en el sector incluyendo la rehabilitación del Caño Martín Peña, para reinvertirlos en la comunidad), (3) garantizar la disponibilidad de vivienda asequible, y (4) hacer viable la implantación del Plan de Desarrollo Integral, contribuyendo a una mejor ciudad.