La Agencia de Sustancias Tóxicas y Registro de Enfermedades (ATSDR, por sus siglas en inglés) concluyó ausencia de vínculos entre la Marina de Guerra y la salud de los viequenses. Esta mirada del ATSDR se da tras aceptar deficiencias en sus evaluaciones originales en una reunión de 2009 con científicos puertorriqueños, incluyendo al doctor Arturo Massol Deyá, de Casa Pueblo, y catedrático del Recinto Universitario de Mayagüez de la Universidad de Puerto Rico (UPR).
«Esa nueva opinión, la que divulgan ahora es inválida», sostuvo el doctor Massol quien realiza estudios en Vieques hace 14 años. «En la reunión de Atlanta de 2009 con la ATSDR, ordenada por el entonces congresista de New Jersey, Steven Rothman, se llegaron a múltiples acuerdos para mejorar el proceso de investigación y reconsideración de conclusiones. Ninguno se ha cumplido», afirmó el catedrático universitario.
Los acuerdos incluían nuevos muestreos, utilización de laboratorios independientes, participación de los peritos puertorriqueños, apertura a científicos del Recinto de Ciencias Médicas, UPR, Yale y Universidad de Georgia así como consultas técnicas a lo largo del proceso, entre otros asuntos. «Desde aquella reunión, nunca se han vuelto a comunicar. Nunca pudieron cuestionar nuestros hallazgos de acumulación de metales en las plantas, la transferencia de metales desde las herbáceas a cabras ni tampoco las observaciones en cangrejos violinistas. ¿Cómo pueden concluir una ausencia de daño cuando la Marina no ha divulgado la naturaleza química de los armamentos que ensayaron en la Isla Nena? Lo único que pueden concluir es que no saben. Tan amañado es el proceso, que poco tiempo después sacaron al director del ATSDR, Howard Frumklin, y lo reemplazaron por la persona que dirigió la primera evaluación cuestionada por el Congreso Federal», recordó Massol y denunció que el ATSDR encubre a la Marina de Guerra y a las agencias federales cuestionadas por el manejo negligente del polígono, como lo es el Servicio de Pesca y Vida Silvestre.
«Queman la vegetación, abrieron las lagunas tóxicas de Anones al mar y no limpian la zona. La complicidad es evidente, como evidente es el crimen ambiental que tapa esta agencia. Imponen con sus actos la pena de muerte en Vieques. Esto es un crimen contra la humanidad», concluyó el portavoz de Casa Pueblo.